El Sudoku mató al geniograma...aunque mal pague
Siempre seré un consumado geniogramista aunque nunca me haya ganado un cobre de premio. Mi viejo me enseñó a llenarlos cuando estaba en 1ro de media hace 25 años. Empecé buscando en el pequeño Larousse los conceptos simples que mi viejo me ponía como quien da un pase de gol sin arquero. Luego me fue explicando la lógica del "juego" y poco a poco empecé a dar el play de honor llenando unos cuantos cuadrados antes que mi viejo lo terminara de dos patadas. Por supuesto también aprendí jamás hacer un geniograma con lapicero, siempre con lápiz.
Cuando le agarré el truco y el gusto ya podía avanzar en gran parte y a veces sólo le dejaba chance a mi papito para que termine las más difíciles, que eran los nombres de las actrices y actores de películas que no estaban en el Larousse y a veces los dichosos premios Nobel. Los sábados los llevabamos a la agencia de Magdalena donde siempre había unos tíos requetetíos llenando las últimas e intercambiando secretos que no estaban en el diccionario.
El hecho es que ser geniogramista me dio una perspectiva original de la vida, una forma de encarar las cosas y aprender a leer las grandes entrelineas del misterio. Encontrar las frases célebres en cada situación ordinaria y simple. En encontrar pequeñas victorias a veces sin ganar la guerra…bueno yo me entiendo. Gracias viejo pues con un lápiz y un geniograma jamás extrañaré la TV.
Sin embargo. Después de llenar cientos de crucigramas, fáciles y difíciles, Frases del día, crucihogar (por los premios a Jamaica) ahora le empezado a tomar gusto al Sudoku (del Perú21 preferentemente), y la primera vez que hice uno me salió muy rápido pero hasta ahora cero cero, no he podido terminar otro más, bueno en realidad eso fue hace una semana solamente. Así que ahora estoy sudando para terminar el de hoy y no terminar como cojudo, ¿de ahí saldrá el nombre?
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